Soy hijo del temor en blanco y negro, del no hables alto que nos pueden oír a través de unas paredes que encierran los secretos, que ni tu mano derecha conoce.
Soy hermano de la caja de cartón, llena de los recuerdos a los que no les di el tiempo de permanecer en la memoria, el tiempo de borrarse de una fotografía doblada, el tiempo de una carta sin destino, ni sello, ni buzón en dónde descansar.
Soy padre del mapa de tu mejilla sonrojada al escuchar el nombre que no quisiste conservar en tu tarjeta de visita, que dejaste olvidado en la estantería de una biblioteca de provincias.
Soy esposo del dolor de una caja de zapatos vacía, de la decepción del pastel quemado en un horno que ya apuró el tronco de leña prestado.
Soy amigo de una lejana sepultura, del túmulo que escondía el final del sendero que nunca quisiste caminar conmigo, el último trago que se dormía al final del vaso, el mendrugo de pan húmedo por las lágrimas inevitables.
Pesan las piernas a cada paso que asciende una cuesta dictada en un fallo sin recurso, en una sentencia redactada por el tribunal de tus labios encarnados.
Y al sentarme en la roca que acaricia el viento que sopla desde tu pecho, miro el último refugio y respiro al saber que tu mano guiará el siguiente pasaje.
Ángel Descalzo Fontbona – marzo 2021

TE mamaste!!!!
> El 11 mar 2021, a las 1:09, ángel descalzo escritor escribió: > >