Nos han mandado en la escuela, que cada uno escoja el objeto del examen de fin de curso. Lo cierto es que en parte me parece una ventaja, pero por otra me causa cierto temor poder crear lazos con lo que me llevará al título soñado, una mala elección podría condicionar el resto de mi carrera.
Ni te digo si escojo lo ya conocido, lo que desde hace tiempo es parte de mi entorno.
Nunca imaginé que fuera tan difícil decidir la tripa de mi examen profesional. Sabía que en la escuela especializada “Jack the Ripper” no te regalan nada.
Ángel Descalzo Fontbona – Junio 2020
